“El cuerpo se convierte en el lienzo, los sonidos y las imágenes acompañan la creación, llegan pinceladas del pasado y de un presente en construcción, ha cambiado el escenario y el tiempo llega a cobrarnos su estadía.” (M.G. 2020) El tiempo como metáfora, evoca los días de la semana, para contemplar ciento sesenta y ocho horas, diez mil ochenta minutos, seiscientos cuatro mil ochocientos segundos. El tiempo, se configura entonces en un acontecer de imágenes y recuerdos para preguntarnos; ¿Cómo pasábamos el tiempo? ¿Qué significa cada día? ¿Qué representa este tiempo de encierro? “¿qué tiempo estamos vivos del tiempo que vivimos?” 1 ¿Cómo quiero pasar el tiempo venidero? 1 Tomada de ‘Cartas a la mujer despierta, alguien por venir’ de Noemí Duran Salvadó. Parte 2, ‘Carta a la eternidad’ (p.75. 2018)